Iniciativa para llevar la genoterapia a países de bajos ingresos

Del Laboratorio Adair, División de Ciencias Traslacionales y Terapéuticas

This story was published in English on August 21st, 2024.

Imagine que está a punto de tener su primer hijo. Siente mucha emoción, pero también muchos nervios. Tras varias horas de parto, por fin nace su bebé. Con mucho cansancio pero con entusiasmo, lleva a su pequeño a casa. Los primeros meses pasan llenos de alegrías y desafíos, pero un día, su bebé empieza a llorar sin parar. A pesar de todo lo que usted hace, nada parece calmarle. 

Empieza a darse cuenta de que hay algo que no está bien. Acude rápidamente a un hospital, donde el personal médico realiza una serie de pruebas. Finalmente, recibe el diagnóstico: anemia drepanocítica o anemia de células falciformes. Casi la mitad de los niños afectados por esta enfermedad no llegan a los 5 años. En ese momento, se enfrenta a una realidad aterradora: ¿existe algún tratamiento? La respuesta a esta pregunta viene dictada por una despiadada lotería: todo depende del lugar de nacimiento. 

La anemia drepanocítica (SCD, por sus siglas en inglés) es un grupo de enfermedades en las que los glóbulos rojos –encargados de transportar el oxígeno por todo el cuerpo– están deformados. Normalmente, los glóbulos rojos son como discos redondos; sin embargo, en la anemia drepanocítica adoptan una apariencia de hoz o media luna debido a una mutación en el gen HBB. Este gen es el encargado de proporcionar instrucciones para producir una proteína llamada hemoglobina (la proteína que confiere a los glóbulos rojos su capacidad de transportar oxígeno). Esta hemoglobina mutante hace que los glóbulos rojos sean rígidos y propensos a morir prematuramente, lo que provoca anemia. Las células falciformes también pueden obstruir pequeños vasos sanguíneos, causando graves complicaciones médicas.

Entonces, ¿cómo podemos reparar estas células? Las terapias farmacológicas han sido en gran medida ineficaces y, hasta hace poco, la única cura disponible para la SCD eran los trasplantes de médula ósea, un proceso que requiere encontrar un donante adecuado y someterse a tratamientos invasivos durante semanas. Afortunadamente, los últimos avances en genoterapia ofrecen una opción más prometedora. La genoterapia consiste en alterar el genoma de una persona mediante la sustitución, la eliminación o la inserción de material genético. Sin embargo, la aplicación de estas terapias no es tan fácil como parece debido a sus altos costos y a la falta de representación de la población más afectada en los ensayos clínicos.

En su última publicaciónla Dra. Jennifer Adair, profesora titular de la División de Ciencias Traslacionales y Terapéuticas de Fred Hutch, subraya la importancia de lograr que la genoterapia sea accesible, razonable y asequible, especialmente en los países de bajos ingresos, donde estos tratamientos son muy necesarios. La investigación de la Dra. Adair se centra en el desarrollo de genoterapias para los cánceres de células madre sanguíneas, incluida la SCD. Aunque la enfermedad suele ser poco frecuente en Norteamérica y Europa –afecta aproximadamente a 1 de cada 2 000 a 3 000 personas–, es más prevaleciente en regiones en desarrollo, donde afecta a aproximadamente 1 de cada 1 300 personas en Sudamérica y el Caribe, 1 de cada 1 000 en la India, 1 de cada 500 en Oriente Medio y 1 de cada 100 en África. 

A pesar de que las genoterapias están disponibles, sus costos son exorbitantes. Por ejemplo, una genoterapia que ha sido aprobada el año pasado en el Reino Unido para tratar la SCD tiene un precio alarmante de 2,2 millones de dólares, lo que la hace inasequible para la mayoría de la población y de los sistemas de salud, incluso en los países desarrollados. Además, los ensayos clínicos para el desarrollo de estas nuevas genoterapias tienen lugar predominantemente en países desarrollados y a menudo pasan por alto al grupo demográfico más afectado: los niños menores de cinco años. Los organismos reguladores de EE. UU. y Europa se han centrado en el tratamiento de las personas más gravemente afectadas (a menudo adultos), lo que inclina las características demografícas de quienes participan en los ensayos hacia poblaciones de mayor edad. 

Un farmacéutico de un centro de salud de la India entrega medicamentos gratuitos a una persona enferma de anemia drepanocítica.
Un farmacéutico de un centro de salud de la India entrega medicamentos gratuitos a una persona enferma de anemia drepanocítica. Imagen extraída del artículo

La Dra. Adair y sus colegas proponen transferir a los países de bajo ingreso las “vías de desarrollo de fármacos” abandonadas. Esta estrategia permitiría que los gobiernos locales inviertan en infraestructuras para la fabricación local de genoterapias, disponiendo de datos de seguridad y eficacia, con el fin de garantizar el acceso a quienes las necesiten. La Dra. Adair cree que este planteamiento impulsaría la investigación y el desarrollo de genoterapias locales, sin la imposición de los estrictos requisitos de los países con altos ingresos. 

Un gran ejemplo de este tipo de estrategia es la Iniciativa Medicamentos para Enfermedades Olvidadas (DNDi, por sus siglas en inglés), llevada a cabo por una organización internacional sin ánimo de lucro que ha desarrollado 13 tratamientos para 6 enfermedades mortales desde 2003, salvando millones de vidas. La DNDi se enfoca en enfermedades que las empresas farmacéuticas tradicionales suelen ignorar porque afectan principalmente a poblaciones de regiones de bajos ingresos. 

De manera similar, la Dra. Adair y la Dra. Cissy Kityo-Mutuluuza cofundaron en 2020 la Iniciativa Mundial de Genoterapia (GGTI, por sus siglas en inglés ), con el fin de facilitar la adopción de genoterapias en naciones de bajos y medianos ingresos, y proporcionar información sobre los avances en genoterapia a personas de todo el mundo. De hecho, Evelyn Mwesigwa Harlow –autora principal e integrante del consejo asesor comunitario de la GGTI– es madre de un niño con anemia drepanocítica en Uganda. Es una firme defensora de pacientes ante el Ministerio de Salud local y fue la donante del trasplante haploidéntico de médula ósea de su hijo, que tuvo lugar en la India en 2020. La GGTI pone énfasis en la importancia de la fabricación local, en las asociaciones con países donde estas enfermedades son prevalecientes y en la realización de ensayos clínicos inclusivos, para que las genoterapias sean más asequibles y eficaces a nivel mundial. 

La GGTI colabora con una red internacional de socios públicos y privados –como universidades, institutos de investigación, empresas farmacéuticas, gobiernos y pacientes– para aprovechar la experiencia y los recursos existentes. Realizan reuniones semanales en las que cualquiera puede participar para aprender más sobre este tipo de terapias y cómo están cambiando el panorama de la genoterapia. ¡Visite su sitio web!

Evelyn y la Dra. Adair recuerdan con emoción las palabras de Elizabeth Merab: “Lo único más difícil que oír que tienes una enfermedad para la cual no hay cura, es oír que tienes una enfermedad para la que hay una cura a la que no puedes acceder”. Merab, integrante del consejo asesor internacional de la GGTI, falleció trágicamente debido a complicaciones de la SCD un año antes de esta publicación, con sólo 31 años de edad.

La Dra. Adair concluye: “todas las personas que padecen una enfermedad devastadora deben tener acceso a una cura cuando ésta existe. El verdadero progreso sólo se producirá cuando los países de bajos ingresos sean integrados en el desarrollo de las genoterapias”.


La GGTI recibe financiamiento de un Premio a la Innovación de la Fundación Bill y Melinda Gates, y el apoyo en especie de Caring Cross. La Dra. Adair es Titular de la Cátedra de Traducción de Genoterapias patrocinada por la familia Fleischauer, que también apoya la infraestructura de la red GGTI. 

La Dra. Jennifer Adair, integrante del Fred Hutch/University of Washington/Seattle Children's Cancer Consortium, contribuyó a este trabajo.

Harlow EM, Adair JE. Make gene therapies more available by manufacturing them in lower-income nations. Nature. 2024 Jul;631(8021):502-504. doi: 10.1038/d41586-024-02310-y. 

Este artículo fue traducido de la versión original en inglés al español por Ángela María Carvajal con la revisión de Celeste Espina en coordinación con las escritoras actuales Joselyn Landazuri y Annabel Olson.


Joss Landazuri (ella)

Joss Landazuri es una doctoranda del Programa de Microbiología de la Universidad de Washington que trabaja en la intersección de la ciencia biomédica, la política pública y la diplomacia científica. Como científica, promotora de políticas y comunicadora de origen latino, le apasiona aprovechar su formación académica, sus experiencias personales y su herencia cultural para incluir a las comunidades marginadas, tanto en la ciencia como en el proceso de elaboración de políticas.